A PROPÓSITO DE UN CASO. 4 SESIONES
Paciente que sufre un dolor en la base del talón diagnosticado médicamente de fascitis plantar, dos años de evolución durante los cuales ha realizado tratamiento médico farmacológico, infiltración y fisioterapia sin éxito.
El dolor es sobre todo al apoyar el pié, y después del reposo al iniciar el movimiento (levantarse por la mañana). Puntos muy sensibles a la palpación en la parte interna del talón.
SESIÓN 1
Después de dos años de evolución es evidente que deben haber más factores añadidos a parte de los propios de la fascitis que complican la evolución de la lesión.
1-OSTEOPATÍA
La valoración osteopática revela una alteración de la circulación de las extremidades inferiores que perjudica cualquier lesión que se puedan tener al no permitir la correcta nutrición de los tejidos.
Con maniobras de osteopatía visceral trabajamos la congestión existente en la pelvis menor que origina congestión.
A nivel de pelvis detectamos bloqueos en las articulaciones sacro ilíacas que condicionaban la mecánica de las extremidades inferiores, es decir el lugar donde recae el peso cuando se camina, la alteración de está mecánica es una causa frecuente de inflamaciones en el pie. Estos bloqueos los solucionamos con técnicas de alta velocidad.
2-FISIOTERAPIA
Utilizamos la punción seca más el masaje en el gemelo interno y tibial posterior para bajar el tono muscular y la sensibilización de la zona.
SESIÓN 2.
La paciente presenta cambios muy leves de su sintomatología.
1-OSTEOPATÍA.
En esta segunda sesión comprobamos que los ajustes realizados en la sesión anterior se mantienen corregidos y podemos realizar con más garantías un trabajo local.
2-FISIOTERAPIA.
En este caso, habiendo objetivado mediante ecografía un daño en el tejido que corresponde con la clínica de la paciente decidimos utilizar la EPI para regenerar la estructura lesionada. Concretamente, aunque la degeneración era generalizada en la zona, la parte que creemos que produce más clínica no era la fascia en sí si no el tendón (tendinitis ) de la musculatura plantar que está por debajo.
Después de realizar la corriente aplicamos un vendaje neuromuscular para proteger la zona.
SESIÓN 3.
En esta ocasión el paciente sintió una mejoría relevante, el dolor aún era presente pero con una menor intensidad.
1-FISIOTERAPIA
Repetimos el tratamiento con EPI para acabar de regenerar el tejido lesionado y añadimos una pauta de ejercicio terapéutico para complementar el tratamiento y afianzar los resultados obtenidos.
SESIÓN 4
Ausencia de clínica, el paciente ya no tenía sintomatología. La imágen ecográfica todavía no mostraba una fascia perfecta pero si lo suficiente para no producir sintomatología en la vida cotidiana del paciente. Dimos por bueno ese resultado, adaptamos la pauta de ejercicios para un obtener un efecto a más largo plazo, aportamos algún consejo dietético y dimos por finalizado el tratamiento.
CONCLUSIONES
1-Después de largo tiempo de evolución intervienen más factores en la lesión que los locales. Normalmente son tensiones o alteraciones que indirectamente y a distancia dificultan la evolución de la lesión: alteraciones posturales,congestiones o tensiones emocionales.
2-La imagen de diagnóstico siempre tiene que complementar la clínica y no al revés. En este caso la imagen final mostraba una estructura que quizás si el paciente tuviera una vida más intensa a nivel físico le daría problemas. Pero hay que adaptar el tratamiento a las necesidades y situación de cada individuo. En este caso, con la desaparición de la sintomatología acordamos con el paciente acabar el tratamiento.